Mujeres del mundo se unen al grito “Un violador en tu camino”

“El patriarcado es un juez que nos juzga por nacer y nuestro castigo es la violencia que no ves”, es la frase con la que inicia “un violador en tu camino”, una canción iniciada por el movimiento “Las Tesis”, en Chile, pero que ha resonado fuerte en diferentes partes del mundo, por miles de mujeres que han decidido salir a las calles y poner un alto a la violencia de género que se vive alrededor del planeta.

El pasado 25 de noviembre, durante las protestas en Chile por el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, decenas de feminas realizaron esta coreografía, realizada por cuatro chilenas de Valparaíso, y la cual se viralizó en redes sociales, volviendose todo un himno para las marchas feministas. 

Esta canción se convirtió este viernes en un grito de mujeres de paises como México, Colombia, Chile, Estados Unidos, Londres, Francia y España, un grito en idiomas distintos y escenarios diferentes, pero con el mismo objetivo común: un reclamo al Estado y la poca respuesta a las alarmantes cifras de casos de feminicidios y violencia de todo tipo hacía el género femenino. 

“Un violador en el camino” habla de la revictimización que viven las mujeres cuando son víctimas de una violación o algún tipo de violencia por parte del Estado, a través de policías, jueces e incluso el mismo presidente.

Estudiantes, abogadas, maestras, artistas, periodistas, amas de casa, mamás, hermanas, primas, amigas, vecinas, pero todas mujeres, ciudadanas de todas partes del mundo. Mujeres diferentes pero ahora unidas, luchando por ser escuchadas y por que nadie se sienta con el derecho de decidir sobre sus cuerpos. Que están cansadas de las injusticias, cansadas de salir a las calles con miedo de no saber si un día de estos formarán parte de la cifras. 

“Y la culpa no era mía, ni dónde estaba ni cómo vestía”, dice el verso más repetido en esta intervención. “El violador eres tú”, la frase que sentencia la letra de esta canción, que dejó de ser solo eso para convertirse en el grito y sobre todo, en la fuerza de las mujeres del planeta, advirtiendo que ahora será más díficil el poder detener su lucha.